De sombreros urbanos a piezas de arte: así fue la tercera edición del Hat Show
En el Hipódromo de Palermo se vivió una jornada a puro diseño. Los jóvenes diseñadores desplegaron toda su creatividad, y un grupo de bailarinas dirigidas por Maximiliano Guerra danzó en la pasarela
Un sombrero gigante, realizado por la artista florar Mónica Duch con aportes de la artista plástica Geraldine Cunto, recibió a los cientos de invitados en el ingreso al Hipodrómo de Palermo durante el Hat Show del 1 de mayo. Con 3 metros de alto y 2,60 metros de ancho, revestida por 2500 ramas y con una gran faja de flores naturales rodeando la base de la copa, la galera era un adelanto de la creatividad que se iba a poder apreciar durante toda la jornada.
La cita fue a las 13 hs, con entrada libre y gratuita, y se realizó a beneficio de la Fundación Ecomujeres. Se le acercó al público las propuestas internacionales y nacionales de diseñadores de sombreros, tocados y fascinators, y se culminó con un desfile que engalano la jornada.
El concepto del desfile fue fusionar el diseño de la indumentaria de algunos reconocidos egresados diseñadores de la Universidad de Palermo, con los diseños de las sombrereras que participaron en el Hat Show. Cada una de ellas trabajo conjuntamente con el diseñador el concepto y la propuesta, pero la realización de los sombreros, tocados y fascinators es exclusiva de todas las sombrereras del Hat Show.
Bajo la curaduría de la reconocida diseñadora Laura Noetinguer, se presentaron propuestas de Mery Seré Atelier, Sejmet, Lilisun, Annlu, Marso Moda, Maison Domecq, De Aquellas Mujeres, Edith Enriquez, Graciela Misasi, María Smith, Roxana Pess, Mónica Duch e Inés Heguy. Además, se contó con la presencia especial de Sergio Calegoya, Susana Mattano y Sol Robles.
«En la feria hubo propuestas muy diversas con el sello propio de cada diseñador. Desde sombreros urbanos hasta verdaderas piezas de arte. La gente estaba fascinada con los diseños y ahí está lo interesante, acercar estas propuestas a la gente», aseguró a Infobae Laura Noetinger, curadora de la feria y diseñadora de tocados, fascinators, vinchas y sombreros.
La esencia del proyecto y de la ocasión era promover el consumo responsable así como los diseños sustentables. «Es muy importante promover el oficio del diseñador de sombreros y promocionar los diseñadores jóvenes. Lo artesanal hace propicia la difusión de las temáticas de la sustentabilidad, dado que el consumo responsable es uno de sus ejes», destacó Noetinger.
«¡Animate y ponete un fascinator!», dictaba la invitación, y aquellas mujeres y hombres que lucieron sus sombreros y fascinators participaron de un concurso que premiaba el sombrero «Más sustentable», el «Más elegante by Chanel», el «Hipódromo de Palermo» y el «Gran Premio República».
El jurado estuvo compuesto por Laura Noetinger, Aleandra Scafatti, Victoria Diez, Geraldine Cunto, Marcela Molinari y Sol Rusch y fue otra manera de animar a las personas a que vayan con un diseño al evento.
El momento más esperado de la jornada fue sin duda el desfile en donde, además de los diseños de las egresadas y alumnas de la UP, se vivió algo sin precedentes: la pasarela fue el escenario de bailarinas de ballet de la escuela de Maximiliano Guerra.
«El ballet de la escuela de Maximiliano Guerra fue algo que me emocionó hasta la médula. Poder presenciar en un escenario como es el Hipódromo de Palermo los diseños mientras se desplegaba el arte de la danza clásica dirigida por el reconocido bailarín fue algo único», aseguró Noetinger.
La especialista aseguró que la diversidad hizo de la ocasión algo mágico: «El marco, el objeto, la moda y el arte todo fue una combinación explosiva».
«En esta ocasión los sombreros y fascinators respetaron cada estilo y propusieron la personalidad del diseñador que va más allá de la tendencia. Si el diseñador presenta su propio estilo eso es lo que nos importa más que tendencia. Porque de esa manera crean tendencia, proponiendo nuevas versiones y estilos», agregó.
By: Constanza Pulgar – De Turf Un Poco